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La celebración del Carnaval puede representar una buena ocasión para hacer gala de un buen ejemplo en el campo de lo ecológico por nuestra parte, utilizando materiales reciclados para crear nuestros disfraces. Creatividad e imaginación, no exentas de respeto por el medio ambiente.
A parte de ser un disfraz sumamente barato en cuanto al coste que va representarnos, la variedad de posibilidades es mayor de la que imaginamos.
Las bolsas de basura, si son negras, se podrán combinar con multitud de elementos.
Para los pequeños, una buena opción será la de disfrazarse algún súper-héroe. Cierto es que la gran mayoría lucen vestimentas de color negro: Black Panther, Venom, Viuda Negra, Bane y, por supuesto, Batman.
Podremos realizar estos disfraces con 5 bolsas de basura, y un poco de fieltro de color amarillo, para construir la insignia y el cinturón.
Paciencia, y algo de maña, de bien seguro darán un buen resultado, y el peque quedará muy contento.
Un disfraz que también puede realizarse con bolsas de basura es el de Chichiyaku, un memorable personaje animado del Anime.
Podemos también crear una especie de guerrero intergaláctico: complementando las bolsas de basura con diferentes elementos realizados en cartulinas de colores. Entre ellos, una fantástica espada hecha así mismo de cartulina.
Una opción para las pequeñas es el disfraz de princesa Disney: usaremos para ello varias bolsas de basura y tres bolsas de plástico de color naranja. Con imaginación, y algo de maña, repetimos, tendremos un original disfraz por el mínimo precio.
Se trata de disfraces, que más allá de la sencillez en cuanto al coste económico que suponen, darán ilusión a los niños. Mientras colaboramos, nosotros los mayores, en el ahorro y la ecología.
Elementos estos últimos a tener en cuenta de manera cada día más necesaria en el mundo en que vivimos.