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La mayoría de las casas se pueden beneficiar de la colocación de un toldo de algún tipo en sus zonas exteriores. No obstante, existen una gran variedad de modos de colocar algún tipo de elemento de sombra, y elegir toldo no siempre resulta sencillo.
Elegir toldo adecuadamente
Cada casa tiene sus propios espacios únicos, y cada uno requiere de un tipo de toldo.
- Toldo de punto recto, que se extiende hacia adelante gracias a unos brazos extensores. Es muy sólido y el más habitual en balcones grandes y establecimientos comerciales.
- Toldo extensible: similar en aspecto al anterior, pero con una estructura que se dobla hasta quedar toda recogida dentro de un tubo de acero. Suele montarse sobre dos patas fijas de acero, aunque también puede montarse en la pared o sobre un techo, y es apto para cualquier ubicación, muy versátil.
- Toldo vertical o estor, que se monta sobre una estructura previa. Es adecuado para terrazas y balcones cubiertos y sirve a la vez para sombrear y dar privacidad.
- Toldo plano. Fijo, se coloca sobre una estructura de mínimo dos patas (si está adosado a una pared). Se puede hacer tan grande como se desee y suele usarse para terrazas muy grandes, patios… Tiene poca inclinación y suelen usarse lonas transpirables, por lo que debe recogerse cuando llueve.
- Capotas, ya sean fijas o plegables. Se trata de una estructura redondeada o cuadrada que se adhiere a la pared sobre ventanas pequeñas o puertas. Su función es sólo proteger la ventana de la luz excesiva y o la lluvia y quedan muy bien en casas antiguas o muy grandes.
- Pérgolas y cenadores: habitualmente cuadrados o redondos. Este tipo de toldos suele tener forma de pirámide, lo que es muy práctico para evacuar el agua de la lluvia. Los hay plegables y fijos. Son adecuados para patios y terrazas y pueden adaptarse a cualquier espacio.
- Toldos vela. Se trata sólo de un trozo de lona que se ata con cuerdas a puntos de soporte. Es perfecto para terrazas pequeñas o para crear sombra en patios pequeños. Hay que disponer de tres o cuatro puntos de apoyo para atarlos y deben estar muy bien fijados para que aguanten el viento y/o la lluvia.