En Toldos Guardamar nos gusta ayudarte siempre que sea posible y en esta ocasión vamos a hablar de la faldilla del toldo. Al estar expuesta, la faldilla del toldo puede acabar dañándose, algo que nos obligará a cambiarla pero… ¿Se puede cambiar? La respuesta es afirmativa, aunque hay que decir que no es un proceso fácil.
Normalmente, los toldos suelen traer a los laterales unas tapas que tienen dos o tres tornillos. Hay que retirarlos y quitar la tapa, lo que nos permitirá acceder para sacar la tela que forma lo que se conoce como faldilla.
Se debe sacar el resto de la lona que se encuentra metida dentro del canal y veremos que en el interior hay un taco que es donde en el interior se encuentra una guía de plástico que sirve para que la tela no se salga del canal en el que se encuentra.
Cuando se tenga preparada la nueva lona, hay que fijarla bien a la guía y ésta meterla en el tubo donde va la faldilla, asegurándonos de que está correctamente metida. Ahora quedaría poner las tapas de los laterales y fijar los tornillos de nuevo.
El proceso puede parecer simple, pero si no se tienen las herramientas y conocimientos necesarios, puede ser algo complejo. Por ello, si tienes la faldilla de tu toldo estropeada, rota o desgastada por la acción de años de sol, lluvia, polvo y suciedad, lo mejor es que tengas en cuenta a los profesionales como nosotros.
Nos encargaremos de cambiar la faldilla de tu toldo rápidamente por el modelo que mejor se adapte al modelo que tienes instalado en tu hogar. Por ello, no tendrás que preocuparte de nada, dado que lo cambiaremos rápidamente y como siempre, con la calidad que siempre nos ha caracterizado.