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El cambio climático es un hecho. Las temperaturas están subiendo, el hielo de los polos se está fundiendo y el nivel del agua del mar está elevándose. Pero no está todo perdido: aún hay pequeños gestos que pueden ayudar a revertir el proceso o, al menos, a ralentizarlo, cosas quizás sin mucha importancia, pero que, una tras otra, pueden cambiar el mundo.
Cambio climático: cómo salvar el planeta
La mayor parte de la culpa del cambio climático es de las empresas. Son las que más contaminan y las que menos se preocupan por el entorno. No obstante, nosotros, como consumidores, podemos tomar ciertas decisiones que no sólo son buenas per se para el planeta, sino que además pueden mover a las empresas a hacer cambios a otro nivel.
Reducir el consumo de plásticos.
Los plásticos están convirtiendo el mundo en un inmenso basurero, y el primer paso para que se dejen de fabricar, es que nadie quiera comprarlos.
Reciclar
Tirar los residuos en el contenedor correspondiente y usar los puntos limpios cuando sea necesario.
Mejorar la eficiencia energética de los hogares
Reducir el consumo de agua
Lavar a baja temperatura y tender al aire libre
Son maneras de ahorrar energía y permite usar menos químicos, ya que el secado al aire ayuda a reducir el olor a humedad, entre otras cosas.
Reutilizar antes que tirar
Alimentarse de manera responsable
Para empezar, ¿sabías que la ganadería es uno de los principales causantes del cambio climático? Reducir el consumo de carne ayudará a revertirlo. Asimismo, se puede reforzar el efecto mediante un consumo responsable, priorizando los productos de temporada y los cultivos ecológicos.
Usar madera de bosques sostenibles
Eliminar el consumo de madera es imposible, pero sí se puede consumir madera de manera responsable.
Viajar menos
El transporte es uno de los principales problemas ecológicos, ya que la gran mayoría de los medios de transporte son altamente contaminantes. Reducir los viajes en avión o barco a los imprescindibles o muy puntuales, optar por la bicicleta o el transporte urbano son acciones claves para reducir la huella medioambiental.
Aprender
La ciencia debe marcarnos el camino. Para ello hay que aprender cada día acerca de qué causa el problema y cuáles son las mejores maneras de afrontarlo. Nunca os neguéis a aprender.