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La instalación de toldos en las ventanas es algo cada vez más común, algo en lo que en Toldos Guardamar somos expertos. Además de diseñar, fabricar e instalar toldos, también proporcionamos a todos los consumidores un asesoramiento profesional para conocer no solo la calidad de nuestros productos sino consejos de instalación, como los que vamos a compartir en este artículo.
Una de los principales motivos es para que no entren los rayos del sol. Cuando hay bastante luz natural, la habitación se iluminará, sin importar si hay un toldo o no, que en definitiva es lo que queremos. En caso de no poner un toldo, dependiendo de dónde esté el bebé, puede recibir los rayos del sol y no está protegido contra la radiación UV.
¿Suena paradójico no? Verte afectado por el sol en tu propia casa. Por eso, la instalación de un toldo permitirá que entre la luz natural pero evitará que se filtre la radiación UV y el bebé estará más seguro.
El segundo de los motivos es el calor. Con un toldo no solo se evita que entre la luz solar directa sino que también se reduce la temperatura del interior de la habitación. Todos sabemos que los bebés suelen ir siempre con bastante ropa en muchas ocasiones.
No tener un toldo instalado en la ventana de su habitación puede hacer que la temperatura suba varios grados, lo que puede provocarle problemas de salud, sobre todo si lo hemos dejado durmiendo está solo.
El tercer motivo es porque con el toldo, se puede conseguir más intimidad. Por ejemplo, si estás dándole el pecho al bebé, con un toldo bien extendido, estarás a salvo de miradas de los vecinos y podrás hacerlo con total tranquilidad.